domingo, 19 de febrero de 2012

La serenidad




Hay días que sería mejor avisar a la gente y decirles que hoy no cuenten contigo. Ya sea porque estás enferma, cansada, estresada, deprimida, o simplemente es domingo y quieres estar off para afrontar que al día siguiente es lunes... Son esos días que sólo te apetece desconectar y dejarte querer y mimar... o tener tu propio día de Spa en casa.


Hoy he tenido un día de esos y me he acordado de una frase que oí por primera vez hace ya varios años, cuando trabajaba en un centro de drogodependientes que iban a reuniones de Alcohólicos Anónimos y de Narcóticos Anónimos.
La verdad es que este grupo tiene tanto seguidores como detractores, y no me voy a meter en eso ahora, desde mi punto de vista tiene cosas muy buenas y otras que no lo son tanto (como todo en esta vida), pero me intento quedar siempre con la parte positiva de las cosas, y en este caso una de ellas es "La Oración de la serenidad". Dice así:

Señor concédeme Serenidad
para aceptar las cosas que no puedo cambiar,
Valor para cambiar aquellas que puedo,
y Sabiduría para reconocer la diferencia.

Puedes cambiar la primera palabra, si no es creyente. Quédate simplemente con el mensaje.



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